Cuba queriamos ir, ver con nos proprios ojos la ultima muralla quien resiste a su vecino, el gigante americano, fuera de topicos y ideologias. Entramos en Santiago de Cuba, ciudadela donde descansan las cenizas de Fidel Castro. Al inicio fui un poco dificil de aceptar todas estas reglas burocraticas, impediannos la utilizacion del telofono satelital, de caminar con Iris fuera de la marina…pero muy pronto la amabilidad y el pragmatismo de los cubanos nos hace olvidar todo. Con Noel, nuestro taxista, voy descubrir la ciudad, el va traer me de todos lados donde quiere con su taxi sovietico fuera de edad y tambien y sobre todo vamos hablar , y el va empiezar a instruirme sobre la vida de los cubanos. No es facil essa vida, los salarios son muy bajos, 8 euros por mes para un obrero ! Y muchos productos faltan, entonces hay que arreglarse, a menudo tener varios empleos para vivir. La educacion, la sanidad son gratuitas, mas los medicamentos, mismo si son baratos, hay que pagarlos. Los transportes baratos, eficaz, mismo si algunos colectivos parecen a transporte de ganado…Una economia de penuria, debido en gran parte al bloqueo organizado por los USA, aquel nos dirigentes europeanos dobleganse bien servilmamente….
Siguendo la costa Sur vamos fondear a Marea del Portillo, aldea de pescadores, pobres, verderamente pobres. Por suerte la comida no falta, es el campo y los pequeños cerdos negros brincan de todos lados, pero no hay mucho mas. Un poco mas lejos, en Cabo Cruz, un aldea de pescadores tambien, encontramos un pueblo mas rico, hay una escuela, los habitantes parecen feliz de su destino. y este va estar el hilo conductor en Cuba, las diferencias pueden ser muy fuertes segun el lugar, mismo de un bario al otro.
Desde Cabo Cruz vamos bordear el recife, anclar en los Jardines de la Reina, en aguas de una claridad exceptional. Tenemos realmente la sensacion de estar en un jardin, con el coral, las gorgonas quien oscilan en la resaca, los remoras, enormes, los baracudas quien hacen la siesta en la sombra del barco y donde los pescadores llegan para trocar langostas contre algunas latas de cerveza.
Luego Cienfuegos, ciudad magnifaca, donde el turismo empieza a estar mas presente, con una calle comercial como podemos ver ahora en todos paises. Aqui va estar Yasmani, el “bicitaxi” con quien vamos descubrir la cuidad y quien va ayurdarnos al largo de nuestra estadia. Valiente Yasmani, quien pedalea todo el dia para pagar el alugar de su bici, pero quien va invitarnos a beber una cerveza, a nosotros quien ganan centenares de veces mas que su trabjo le da….Hay Garijo, quien nos acoge en su jardin, un paraiso para los marineros sedientos de verdura, donde todo es bio, ( como en todo Cuba ya que no hay dinero para comprar abono o pesticidas). El debera a veces vender una galina para comprar la comida para las que quedan…
Luego mas fondadeos de sueno cerca de Cayo largo, y empiezamos a tomar rumbo al Este despues del Cabp San Antonio. Aqui cambio de paisaje, anclamo en los Cayos de la leña, en plena manglar, lejo de todo, debajo de la mirada de los hurones y aguilas pescadores. Deberamos dejar este pequeño paraiso por la Marina Hemingway, muy cerca de La Habana para escapar del mal tiempo quien anunciarse. Una vez mas vamos hacer compra de langostas en el camino…
Marina Hemingway es una sorpresa para nosotros. Primero es muy grande, mucha verde, nuestras mascotas van poder brincar a tierra, y tendremos muchos contactos con otros navegantes, todos con su historia, como Jean Louis, el dialysado quien hace la vuelta del mundo, y muchos otros.
Jorge, el taxista, nos hace descubrir La Habana, con su Chevrolet de 1949, la edad del Capitano ! El nos lleva primero al defile del Primero de Mayo, quien no quieramos faltar de ningun manera : mas de un million de cubanos en las calles, niños, jovenes, estudiantes, obreros, militares, todo esso en un ambiante caluroso, sin policia ni servicio de orden. Tenemos los ojos y el coraçon llenos y mismo estaremos interviuvados por la prensa local !
Enseguido la visita a la Finca Vigia, esplendida propriedad de Hemingway. Estaremos una vez mas sorprendido de ver como la memoria de la amistad entre Fidel Castro y el escritor queda viva. Amistad y respecto mutual, para los hombres como para la revolucion. El yate “Pilar” es aqui , perfectamente conservado, y Jorge traenos hasta el pequeño puerto de Cojimar, del qual salia Hemingway para pescar.
Vamos visitar La Habana por supesto, con el bario nuevo, muy europeano, La Habana central, paralizada en la epoca “arts déco”, y La Habana la vieja, como a la epoca colonial. Muchos turistas, claro, pero la cuidad es tan bonita. El Fusterlandia, cerca de la marina, con sus mosaicos a la manera de Gaudi no hace excepcion.
Vamos dejar Cuba con el recuerdo de sus habitantes calurosos, generosos, quien combaten en contra de un cotidiano a veces absurdo, pero sin rancor, sin amargura. Un pais magnifico, privigeliado por la naturaleza pero castigado implacadamente cada año por los ciclones, terra de contrastes quien no merece el destino que le impone este imbecil y peligroso loco de Trump.