Puerto Montt, ya estamos lejos de los rios tranquilos de Valdivia, el puerto, dominado por los volcanos, se torno hacia el oceano y la isla de Chiloé, muy cerca. Los pescadores agrupanse en el canal Tenglo, nos vamos al mercado en Angelmo, bario para turistas pero donde los chilotes venden sus verduras. Asistaremos a la Fiesta Patria, con sus cabalgatas, sus dansas, chicos y adultos en traje tradicional, sus casetas, aprovecharemos del Club de Yates Reloncavi para pintar el casco antes de ir a Chiloé.
Una pequeña vuelta a Argentina, con el bus, para renovar nuestros visas ( ya hace 6 meses que estamos en Chile) , crusamos entonces las Andes para Bariloche, la “Suiza Argentina”, y mientras tanto hacer provision de chocolate, de libros, de besos al Saint Bernard, de paisajes magnificos.
Mechuque, antepuesto de Chiloé, donde ya se construian barcos de madera de cipres, calfatados con corteza de alerce, donde las casas son sobre palafitos como en Castro, donde las overas pasean en las calles, y donde los cisnes, cormoranes, patos vapor nos rodean.
Quemchi, patria de Francisco Coloane, con su museo, sus pescadores que se convertian en artistas. Castro, la colorada, su esplendida iglesia de madera, luego Quellon, mas la Sur, donde se agrupa una enorme flota de pesca.
Siguemos rumbo al Sur, el buen tiempo nos acompagne para crusar las Bocas del Guafo, los volcanos nos acompagnan, llegamos en las islas Chonos, ultimo arquipielago antes del Golfo de Penas y los canales de Patagonia. No queda nada de los Chonos, hace mucho tiempo que han desaparecido, tragados por la historia, sin dejar huelas.