Hemos crusado un vez mas el mar del Norte, una vez mas no se ha monstrado facil. Teniamos entonces de parar en Esbjerg, que conocemos bien, y esperar casi dos semanas en la nueva “marina” que los vientos cambian. No pudiamos ir muy lejos, teniamos de entrar en Oudeschild, en la Isla de Texel, en Hollanda, y no teniamos de arrepentirnos, tan la atmosfera de este puerto de pesca es sobrecogeredora y nueva para nosotros : los polders rodeados de diquas, las overas quien pacen, el pueblo acurrucardo en bajo, las bombas que podemos oir, de dia y de noche, y impeden al agua de subir demasiado…Hacemos la compra de quesos y llegamos en Boulogne, contentos de dejar atras un mar quien no mas es una, con gigantescos campos de eolicos quien hacen concurencia a las plataformas de petroleo, con pasillos de navegacion quien no ofrecen mucho espacio ni placer a los marineros, donde la naturaleza parece destruida…
En Lézardrieux encontramos de nuevo el amigo Gilles, quien nos hace descubrir el Trieux de su juventud y el Castilo de La Roche Jagu, esplendido, el amigo Alain nos hace conocer Dominique y Xavier, descubrir el Sillon de Talbert, lluego regresamos sin retraso al Aber Wrac’h donde vamos pasar el invierno
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Son las vacaciones, Manon, Enzo y Kylian reencuentran nuestro modo de vida : paseos, excursion al faro de “l’Ile Vierge”, visita del “Bel Espoir”, en el “Moulin de l’Enfer” donde traballa ahora Jean Yves, el amigo carpintero, grandes mesas con Paskal, Tao y Lucie, en resumen, vacaciones!
El invierno instalase, tempestades, lluva, tormentas, tendramos de todo ! Por suerte vamos encontrar un abrigo para barnizar los dos mastils en el astillero de “Saint Antoine”, y pocas ventanas en el tiempo para le desintalar, y reinstalar. Gracias a Bruno, Morgan y Bastien ! Para la costura Sofi nos haciera todo lo que necesitiamos, mismo el bandana de Iris ! Tendramos tambien momentos para hacer grandes paseos, son infinitos, lo que da la alegria a nuestro pero. Lise nos enseña en cosechar las alguas, en secar les, y a les comer ! En cambio regalamos su hija Jeanne de un pequeño roble, una bellota recogado en las riberas del Trieux y lluego criado en “Skoiern”, como para nos hacer perdonar de utilizar tanta madera en nuestro barco.
Y sempre, sempre, el alma de Michel Jaouen quien planea sobre el Aber : el “Rara Avis, las cabanas de Penn Enez, los chicos llegando de todos los rincon del mundo y quien le oyan decir :” Arreglaselas para estar feliz…”
En febrero , con Enzo y Manon, peregrinacion en Marseille, que encontramos cambiado en algunos aspectos pero aqui nos reencontramos y reencontramos la familla : Jacques, Sophie, la “grande” Manon, Ibrahim, Emilie, Kylian, Virgile, y los amigos marineros : Daniel y Monique, Eric de la isla del Frioul, Margot y Philippe en el “Don du Vent”, Michel en su “Léopard Normand” : comprabamos nuestros barcos en mismo año, en 1979… Las calanques, la Sainte Victoire, el Frioul, la Société Nautique, el Panier, la rua Longue des Capucins, la Corniche y el Valon des Auffes, el Pharo, las Goudes, Saint Victor y el Four des Navettes, necesitiamos mucho mas tiempo en essa ciudad que queremos, donde hemos vivido un gran parte de nuestra vida de marinero. Mucha, mucha emocion.
Y el Covid 19 llega, poco antes de la primavera, con su cortejo de desolacion, con el confinamento, carcel moderna para una humanidad quien recibe una terrible leccion, ella quien pensaba que bastaba un smartphone para estar feliz…
Por tanto, que la naturaleza es hermosa…